martes, 21 de abril de 2015

Libertad de mi expresión

Todos se llenan la boca con la libertad de expresión, no hay partido político que se atreva a cuestionar este derecho abiertamente, pero siempre llegan los PERO. Es indudable, e innegable, que algunos medios de comunicación y muchos individuos a nivel personal difunden opiniones, más equivocadas o menos, con objetivo de manipular o influir en el resto de personas. Esto es así, y cuanto antes se asuma más debate inútil nos ahorramos. No existe ninguna persona absolutamente imparcial, es imposible. Podemos intentar, con más o menos acierto, dar las noticias lo menos subjetivamente posible, pero desde el momento en que elegimos dar una noticia y no otra ya estamos "manipulando". Vale, una vez asumido esto, llega lo siguiente.

¿Debería prohibirse que se difundieran opiniones equivocadas? ¿O opiniones claramente sesgadas
con intención de manipular o influir en los demás? ¿Prohibimos solo las que hacen apología de ideologías extremas? ¿No censuramos nada? Las respuestas a estas preguntas, para mí, son unos rayos x de la persona con la que estoy hablando. Me dicen mucho de lo que tiene en la cabeza mi interlocutor, y ojo, al final aquí no va de ideologías, porque da igual que el tío me diga que es de izquierdas o de derechas, que vote a VOX o a PC, las ganas de censurar están en todos los bandos. Vamos por partes.

Prohibir difusión de opiniones equivocadas significaría, y sin ápice de vacilación, cerrar Twitter, Facebook, todas las webs de blogs, columnas de opinión de periódicos, tertulias de radios, platós de televisión... Si me apuráis tendrían que prohibirse peluquerías, panaderías, las puertas de los colegios, y todo lo que conlleve que dos personas se acerquen a hablar. Cualquiera puede tener una opinión equivocada, y te puede joder más o menos, pero es eso, una opinión. No es un dogma, No es una ley. Es una opinión y como dice mi madre las opiniones son como el culo, todo el mundo tiene, aunque los haya más agradables a la vista que otros. La opinión no es el problema, el problema es tanto del emisor como del receptor. De la falta de comprensión lectora del receptor, que interprete como mandamiento una opinión, y del emisor por sentenciar con cada frase. Y, OJO, que lo que acabo de soltar es opinión, y podéis estar de acuerdo o no.

Prohibir las opiniones claramente sesgadas con intención de manipular significaría cerrar todas las editoriales de los tabloides nacionales. Y todos los departamentos de comunicación de todos los partidos políticos. Y todas las empresas de publicidad y marketing. Deberíamos desterrar la costumbre de decir cosas que todos sabemos que son inaceptables, sí, pero debería ser un gesto que saliera de nosotros mismos, de nuestra ética y moral, no por imposición.

Prohibir las apologías extremas. Aquí es donde probablemente me encontraré más oposición. Con apología extrema entiendo que son esos mensajes que, siendo muy brutos, sueltan un "viva eta y la madre que los parió y tenían que haber matado a más gente todavía", pá entendernos entre colegas. Ojo, que también puede ser un mensaje diciendo que la única iglesia que ilumina es la que arde. O se puede considerar "extremo" los tuits que algún chavalito estúpido escribió tras estrellarse el avión hace pocas semanas diciendo que daba igual porque no iban españoles sino catalanes. ¿Hasta aquí todos de acuerdo?
Pues bien, que alguien con un bonito nick y un payaso de avatar me desee un tiro en la nuca por twitter no debería estar prohibido. Y no creo que haya nada más extremo que eso. Llamar a la guerra santa, tampoco. A la invasión de Gibraltar, tampoco. Y todas esas chorradas o extremismos que se os puedan ocurrir. ¿Que por qué? Porque lo que para mí es una chorrada o incluso humor negro (que es como las piernas, ya sabes, no todo el mundo tiene) para ti puede ser apología del terrorismo. "No, hombre, como va a ser lo mismo..." Las portadas de Charlie Hebdo, por ejemplo, lo que para nosotros es humor, para los musulmanes es atroz y extremista. Y no por ello tienen derecho ni a prohibirlo ni a atentar contra los autores. SOLO SON PALABRAS. Te joden más o menos, pero son palabras.

Creo que está bastante claro que mi opinión es la no censura. Con solo 26 años y ya me he encontrado ultra derechistas queriendo callar a los rojos de mierda y a comunistas queriendo callar a los nazis asquerosos. Por eso digo que da igual el bando. Los cristianos prohibirían el corán y los musulmanes cualquier publicación que ilustrara a Mahoma. La cosa es que todos queremos que se hable de nuestra opinión, de nuestra ideología, y queremos acallar toda oposición olvidando que los que están frente a nosotros tienen exactamente las mismas ganas que nosotros, los mismos derechos a saber y a opinar lo que les salga de la churra. En ocasiones, tenemos una idea formada sobre algo y puede que ni siquiera seamos conscientes de lo mucho que queremos que esa idea sea correcta, y nos esforzamos en buscar voces amigas hasta el punto de desear que el "equivocado" (a nuestros ojos) deje de pervertir al mundo con la opinión incorrecta. En fin, que por mucho que instintivamente me guste cerrarles la boca a todos los católicos, tengo que asumir que tienen derecho a creer y expresar su idiot... opinión en voz alta. Y como yo, todos. 


"Es imposible que un hombre que goza de libertad, imagine lo que representar estar privado de ella"
- Truman Capote -

No hay comentarios:

Publicar un comentario